1. Los niños y las niñas aprenden jugando. El juego es libre y espontáneo. No hay juguetes de niños o de niñas. Evita los que transmitan esas ideas.
2. No hay colores de niños o niñas, sólo etiquetas sociales que limitan la creatividad. Elijamos los colores y no dejemos que los colores nos elijan.
3. Intenta elegir juguetes que reflejen la diversidad de cada persona: somos iguales, somos diferentes.
4. Orientando en una buena lección de juguetes también estás educando. Escoge con acierto, teniendo en cuenta que sean seguros, acorde con la edad y libre de prejuicios sexistas.
5. Elige juguetes que reúnan a niños y niñas cooperando y compartiendo espacios, tanto públicos como domésticos. Les enseñaras a construir un mundo más libre e igualitario.
6. Regala juguetes que ayuden a promover todas las capacidades y habilidades personales de niños y niñas, posibilitando tanto juegos tranquilos como los que requieran actividad física.
7. Busca juegos y juguetes que potencien la igualdad en la participación y el desarrollo de sentimientos y afectos, sin diferenciación de niño y niñas.
8. Evita juegos, juguetes o videojuegos violentos. Educa para resolver los problemas de forma positiva, constructiva y creativa.
9. A veces la publicidad muestra imágenes y valores distintos de los que queremos enseñarles. Es importante escuchar a las niñas y a los niños, no hay que ignorar sus peticiones, pero tampoco decirles si a todo.
10. Busca libro, juegos, videojuegos y libros en los que se nombren y estén presentes los niños y las niñas.
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Yo creo que no es necesario buscar juguetes que sean «neutros», creo que es mejor quitarle la importancia que le damos a comprarle a un niño por ejemplo una cocinita. Tiene la importancia que que nosotros le queremos dar, ¿a caso no hay grandes cocineros?
Nosotros compramos una casita de madera para nuestros hijos de Casitas Green House, para nuestros hijos, un niño y una niña, y ellos han decidido que juguetes querían colocar allí dentro. Uno de ellos es una cocinita, también hay un pequeño circuito de coches y ambos juegan a las dos cosas. Y no hay que verlo como algo extraño.
La clave no es elegir juguetes no sexistas, la clave es atender sus gustos y sobre todo no darle la importancia que muchos padres les damos.
Elena
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