¿Miedo a la maternidad?

century theatreaug 19 20178-00 pm (3)

La mayoría sabe que soy abogada y antes de toda mi vida digital, litigaba en materia mercantil como representante de Bancos, después en el servicio público me encargué de la sección de embargos, y aunque no lo crean era inmensamente feliz. Mi soberbia me hacía alzar la voz hasta a los juzgadores y hacer todo lo que siempre he querido; pero había algo que me daba mucho miedo, terror, pánico: la maternidad.

No era una mujer maternal. No sabía cocinar y me daba pereza hasta calentar una tortilla, así que sopeaba de la olla la comida fría y me lavaba los dientes para luego dormir. Luego me casé. Mi marido simplemente es maravilloso, pero yo era un desastre. Mi cabeza me hacía temerle a casi todo, viví una gran depresión por absolutamente nada, o eso pensaba, pero básicamente era mi miedo a la maternidad.

 

Una parte de mí, quería ser madre, pero las otras veinte partes les daban miedo, terror, pánico. Significaba ser una adulta a cargo de alguien, no ser egoísta como para arruinarle la vida, darle amor incondicional, alimentos de forma ordenada, etc. Se me hacía la cosa más complicada del mundo; prefería hacer un amparo contra una ley que embarazarme.

Así me la pase un par de años, sí, años.

Finalmente, un día cansada de estar deprimida, inicié terapia. Más de un año con sesiones de 3 veces a la semana fue lo que necesite para decidirme, sí, sí quiero ser madre. Se lee en una frase, pero fue complejo, lloré por todos mis traumas y huellas de abandono, culpa por pensar no merecer la felicidad y todas las telarañas que te puedes imaginar. Me sentí frustrada en más de una ocasión, torpe de meditar algo que casi todo el mundo lo hace sin pensar, por reacción, pero bueno, soy así, analítica.

Luego, cuando por fin me embarace, un auto me atropello. Ahí, tirada en el suelo, lloré. Si lo había perdido, simplemente no quería levantarme del suelo, no quería vivir. Afortunadamente, mi hija ahora cumple 11 años, es sana, latosa y muy amorosa. Me enseñó a ser una mejor persona, a vencer todos los miedos, ahora casi me vuelvo a sentir fuerte y libre que me postulé para un trabajo (nadie se asuste, no dejaré amigos), pero voy necesitando más.

 

Escribo este post para mis amigas que tienen inmensas ganas de ser madre, pero que sus miedos son más grande, date la oportunidad de limpiar tu mente de telarañas y sé feliz.

Si tienes una duda jurídica respecto a derechos de niños, niñas o adolescentes, te invitamos a visitar la página www.angelicameza.com o en caso de urgencia en la ciudad de México mandar mensaje al WhatsApp 551697 3391 con Angélica Meza

 

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: